Debemos darnos cuenta del valor de las bendiciones que Dios puso en sus palabras y la verdad con el fin de dar a sus hijos la herencia celestial inconmensurable.
- Los israelitas fueron destruidos en el desierto mientras se quejaban, porque no conocían el valor de la promesa de Dios.
- Rusia se lamentó de haber vendido Alaska a los Estados Unidos a un precio muy bajo, sin conocer su valor.
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